En este estudio, los investigadores de la Facultad de Salud
escanearon por fMRI a unos bailarines profesionales de ballet para medir
los efectos a largo plazo del aprendizaje.El aprendizaje y el
rendimiento durante siete semanas llevó a un aumento en la activación de
las regiones corticales de los aprendices de danza en comparación con
la primera semana inicial, según muestra el estudio. Sin embargo, a las
34 semanas, se redujo la activación en comparación con la semana de
siete.
"La práctica hace la perfección" podría ser el cliché, y ahora un nuevo
estudio del cerebro de la Universidad de York confirma esta vieja
teoría.
"Queríamos estudiar cómo se activa el cerebro con el ensayo a largo
plazo de las complejas secuencias motoras del baile", comentaba el
profesor Joseph DeSouza,
que estudia y apoya a personas con la enfermedad de Parkinson. "El
resultado de este estudio ayudará a comprender el aprendizaje motor y el
desarrollo de tratamientos eficaces para rehabilitar el cerebro dañado o
enfermo."
Para el estudio, se pidió a 11 bailarines (19-50 años de edad) del
Ballet Nacional de Canadá, que visualizaran los movimientos de baile de
la música, mientras eran explorados por fMRI. Las exploraciones medían
el nivel dependiente de sangre-oxígeno (BOLD) contrastados en cuatro
momentos a lo largo de 34 semanas, conforme estaban aprendiendo el nuevo
baile.
"Nuestro objetivo era conocer el impacto a largo plazo de los cambios
corticales que ocurren desde el aprendizaje de una secuencia de motora
hasta convertirse en un experto en ello", señalaba la coautora Rachel
Bar, que a su vez, fue también bailarina de ballet. "Nuestros resultados
también sugieren que la comprensión de las bases neuronales de las
tareas motoras complejas, como el aprendizaje de una nueva danza, puede
ser un modelo eficaz para estudiar el aprendizaje motor en el mundo
real."
Los resultados mostraron que el aprendizaje inicial y el rendimiento, a
las siete semanas, llevó a un incremento de activación de las regiones
corticales durante la visualización de la danza que estaban aprendiendo,
comparado con la primera semana. Sin embargo, a las 34 semanas, se
mostró que la activación se reducía en comparación con la semana de
siete.
"Hemos hallado que en el proceso de aprendizaje, nuestra función
cerebral crea un patrón invertido de aprendizaje 'U', desde un ritmo
lento al comienzo, acelerando a un pico en el punto medio, antes de
volver a su ritmo original cuando hemos dominado la tarea”, explica
DeSouza. "Un ejemplo cotidiano podría ser el aprender a conducir un
coche manual, en el que constantemente tiene que pensar en cambiar las
marchas hasta que lo dominas y entonces lo haces por instintivamente."
***********************************
--Fuente: Universidad de York .
--Publicación: Rachel J. Bar, Joseph F. X. DeSouza. Tracking Plasticity:
Effects of Long-Term Rehearsal in Expert Dancers Encoding Music to
Movement. PLOS ONE, 2016; 11 (1): e0147731 DOI: 10.1371/journal.pone.0147731 .
--Imagen Universidad de York .
visto en:http://bitnavegante.blogspot.com.es
No hay comentarios:
Publicar un comentario