Por RT
Un grupo internacional de investigadores ha realizado un experimento científico en el que durante dos semanas un grupo de los estadounidenses y uno de sudafricanos se han intercambiado las dietas. Los resultados han mostrado cambios espectaculares en la salud de los voluntarios.
De acuerdo con el estudio publicado en la revista ‘Nature‘, veinte estudiantes de la ciudad de Pittsburgh, EE.UU., sustituyeron la comida chatarra por las papillas de maíz, el arroz, el mango y los frijoles, mientras que veinte habitantes de la zona de Zululandia, Sudáfrica, abandonaron su dieta habitual y empezaron a consumir hamburguesas, patatas fritas y perritos calientes.
“Este estudio demuestra el poder de un cambio de dieta”, explica el director del estudio, el médico Stephen O’Keefe. De acuerdo con el científico, al final del experimento ambos grupos de participantes experimentaron cambios en los factores de riesgo del cáncer de colon.
El trabajo ha confirmado que una dieta pobre en fibra y rica en grasa y proteína animal aumenta el riesgo de desarrollo de un tumor en el intestino grueso, y que una dieta con las características del menú africano previene las inflamaciones en el colon y favorece la digestión.
“La comida con grasa no es un veneno, pero supone un incremento del riesgo de cáncer. Hay que seguir una dieta saludable: más proteína vegetal, menos grasas y proteínas animales, más cereales y más verduras”, aconseja el presidente de la Sociedad Española de Patología Digestiva, el médico Fernando Carballo.
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